lunes, 7 de noviembre de 2011

El Liceo Escolar

El Liceo Escolar era un colegio fundado en 1906 por el matrimonio de maestros leridanos formado por Frederic Godàs Legido y Victorina Vila Badia, con la intención de introducir un modelo pedagógico moderno basado en la libertad, la igualdad, la ayuda mutua y el compartir.
Sus primeras instalaciones estaban en la calle Cavallers núm. 22 y aun a pesar de que comenzó con un solo alumno, su éxito fue tal que dos años después tuvo que trasladarse al no disponer de suficiente espacio, esta vez al núm. 42 de la misma calle, al edificio hoy conocido como Casa Maranyosa.
En 1911, Victorina Vila funda la escuela femenina y con el nuevo incremento de alumnos, de nuevo tuvieron que buscar otra ubicación, ahora en la avenida Blondel.
El éxito del colegio fue tal que, desde 1914 a 1920, se abrieron 6 nuevos centros en diversas localidades de la provincia y es que, pese a ser una escuela de iniciativa privada, Godàs estableció unos precios muy populares para facilitar a los hijos de familias modestas el acceso a una educación básica, que hasta el momento estaba bastante limitada a las clases más acomodadas.
El Liceo Escolar fue la primera escuela leridana inscrita dentro del movimiento de la Escola Nova Catalana y supuso una revolución en la pedagogía porque el matrimonio Godàs-Vila creía en una educación sin discriminación de sexos, de modo que niños y niñas compartían aulas y adquirían los mismos conocimientos (aunque a las niñas, además, se les enseñaban las materias típicas femeninas relacionadas con el hogar), a los alumnos se les dejaba hablar catalán a pesar de que muchas asignaturas debían ser impartidas en castellano. Además, los estudiantes daban conferencias, preparaban exposiciones de los trabajos realizados e interpretaban obras de teatro, actividades que aunque actualmente forman parte de la rutina escolar, eran verdaderamente inusuales a principios del 1900.
Para que os hagais una idea de la forma de pensar de los maestros que acompañaron a Godàs en su proyecto, transcribo las palabras de un profesor de francés que tuvo el Liceo y que fueron publicadas en el Boletín que emitía regularmente el centro: "L'Espagne ne devrait pas se contenter de posséder les plus belles femmes de l'Europe. Elle dévrait aussi avoir à coeur de les instruire" (España no debería contentarse en poseer las mujeres más bellas de Europa. Debería también tener empeño en educarlas).
Este Boletín, titulado "El alma de nuestra escuela" recogía el adelantado pensar de Frederic Godàs sobre la educación: “Todo cuanto se haga a favor de los niños contribuirá al mejoramiento de la sociedad”.

Sin embargo, dos trágicos hechos marcaron el final de este hermoso proyecto que fue el Liceo Escolar; el primero, la prematura muerte de Godàs en 1920, a los 41 años de edad y ocurrida en Francia, precisamente cuando se encontraba visitando al profesor de francés del que os acabo de hablar y el segundo, sucedido el 2 de noviembre de 1937, cuando la escuela fue bombardeada por aviones de la Aviazione Legionaria Italiana (hecho que se ha descubierto recientemente ya que hasta hace poco se creía que los aviones eran de la Legión Cóndor). Lo que no ha podido determinarse es si fue el bombardeo fue un error o un verdadero objetivo militar dada la gran vinculación de la escuela con las juventudes republicanas de Lleida. Incluso se piensa que pudo ser un complot preparado desde la misma ciudad porque, incomprensiblemente, aquella mañana no sonaron las alarmas de aviso. Las bombas que azotaron la ciudad durante horas provocaron la muerte de más de 200 personas, entre ellas, 48 niños de entre 7 y 11 años, todos alumnos del Liceo Escolar, varios profesores, que también se encontraban en el centro, todos los pasajeros de un autobús de línea que circulaba por la zona, numerosos ciudadanos que se encontraban en la calle o en el vecino Mercat de Sant Lluís y una decena de alumnos de otros dos colegios cercanos.
Os dejo una foto del Mercat, tomada en 1910, unos años antes de la tragedia:

Los hechos fueron silenciados por el régimen franquista, hasta el punto que alguien hizo desaparecer el tanto el libro de registro del cementerio de esos días como el libro de honor en el que se inscribió los nombres de los fallecidos, sin que hayan aparecido ninguno de los dos.

El trágico suceso es algo muy presente en la memoria de los leridanos ya que todavía queda algún superviviente de aquel día y muchísima gente tiene familiares que fallecieron ese triste día. En recuerdo a las víctimas y ante el lugar donde se erigía el Liceo Escolar, en la calle Blondel, hay una escultura, de nombre "Memòria, Dignitat i Vida" realizada con el mismo material de las bombas y que simboliza una figura masculina yaciendo en el suelo:
De este modo aparecía la escultura en noviembre de 2007, al cumplirse 70 años de la masacre:

Mi vinculación personal con el tema es que enn mis años de voluntaria en la Cruz Roja tuve el gran placer de conocer a Fede, nieto del matrimonio fundador del Liceo Escolar, que es ahora un adorable y vital abuelo, con los ojos azules más bonitos que he visto nunca, y al que no me cansaba nunca de escuchar. Su mujer, Herminia, después de una durísima labor de investigación, publicó un interesantísimo y a la vez entrañable libro sobre la historia del Liceo Escolar:
Y también, de casualidad, conocí a Enric, otro venerable anciano que calza siempre deportivas y que en 1937 era alumno del centro pero justamente, el día del bombardeo estaba enfermo con gripe y su madre hizo que se quedara en casa. Todavía hoy recuerda con emoción a sus amiguitos fallecidos.
Es el que aparece en la fotografía en pantalón claro y camisa roja.

Este post está dedicado con mucho cariño a Fede, Herminia y Enric.
A los demás, espero que os haya gustado.

7 comentarios:

Enrique dijo...

Que historia más interesante y conmovedora a la vez. Como tu dices no me extrañaría que el bombardeo hubiera ido intencionadamente dirigido hacia la escuela, aunque es un suceso realmente espeluznante y triste. Por otro lado, el hecho de que un día dejas de ir al cole por gripe y que por eso salvas la vida, como le ocurrió a mi tocayo, es una historia increible. Ese hombre debió pensar que volvió a nacer.
Muy buen post Marta!!!
Besos

Mar dijo...

Gracias Enrique, me alegra que te haya gustado. Se me olvidó añadir en el post que ahora hay una escuela en la ciudad que lleva el nombre de Frederic Godàs. Creo que a él le gustaría.

Ángeles dijo...

Un post bien interesante, me ha gustado muchisimo.
Desde luego hay que ser miserable para bombardear a los civiles, recuerdo un documental en tv3, en el que explicaron que la guerra civil española sirvio de "ensayo" para esta clase de bombardeos indiscriminados a la población.
Me ha gustado mucho conocer esta historia, un beso.

Mar dijo...

Gracias Angeles! Si alguna vez visitais Lleida, no os será difícil encontrar donde ocurrió porqué es una calle muy céntrica.
Un abrazo.

Betweenmydresses dijo...

Hola Mar!! cómo estás?? Vaya historia!!Nunca había oído hablar de ella. Es muy emotiva!! Tiene que ser conmovedor escuchar la historia de la mano de los supervivientes o de sus familiares más directos. La de cosas que se le pasarían por la cabeza al pobrecito que por culpa de la gripe salvó la vida. Un besazo!!

Mar dijo...

Hola!! Celebro que te haya gustado el post! Te mando un besazo gigante para tus peques!!

Ángeles dijo...

Hola Marta , acabo de leer en el blog de Cristina que vas a tener un bebe,Felicidades¡¡¡